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domingo, 31 de enero de 2016

Un asunto de deudas

Pepeccolo y su amigo Muten Ángel fueron a visitar a Mr. Adriano, porque ya se acercaba la final del mundial de lucha y ambos necesitaban dinero. Habían acordado que, pasase quien pasase de los dos, se repartirían el dinero del premio.

Y, como todos sabéis, Mr. Adriano siempre conservaba su título a base de mañas y trucos. No obstante, últimamente se había visto obligado a dar el dinero del premio a cambio de ostentar el título de campeón. Todavía está reciente cómo hizo esa transacción con la androide Lucía.

El caso es, que al llegar a casa de Mr. Adriano, encontraron la puerta abierta, con todo lo que había dentro destrozado.

- ¿Qué habrá pasado, Pepeccolo?- Inquirió Muten Ángel.
- Ni idea. Pero si él no está, nos quedamos sin torneo. Y sin dinero. Hay que buscarlo.
- ¡Mira! Por ahí va Majin Senior, quizá él lo ha visto. Suelen irse por ahí a comer galletas juntos.- Señaló Muten Ángel.
- ¡Eh! Espera Majin Senior. Queremos saber dónde puede estar Mr. Adriano. ¿Podrías ayudarnos?- Inquirió Pepeccolo mientras le cortaba el paso.
- ¡Galletas!
- ¿Pero qué dices?
- ¡Galletas!
- No. No. Lo que queremos es ver a Mr. Adriano.
- ¡Galletas! ¡Galletas! ¡Galletas!
- ¿Qué le habrá pasado? Está como ido. Nunca lo había visto así, con esa sonrisa bobalicona.- Reflexionó Pepeccolo.
- Bueno, dejémoslo. Iremos por nuestra cuenta. Adiós Majin.
- ¡Galletas!

Ambos prosiguieron su camino, y vieron a Ana Videl, la hija de Mr. Adriano, que estaba hablando con Son Gokarlos.

- Ey, ¿habéis visto a Mr. Adriano por aquí?
- Ni idea. La última vez que lo ví había ido a casa de la androide Lucía a por galletas. Había quedado con Majin Senior en su casa después para comer.
- Si lo veis decidle que a mí me tenía que guardar una.- Cortó Son Gokarlos.
- Pero entonces, ¿donde podría estar?
- Probad a mirad en el parque. Allí es donde suele irse.
- Está bien. Gracias.

Así, ambos se fueron volando al parque. Y, en efecto, allí se encontraba Mr. Adriano, tumbado en la hierba con Ten Shin Javihan, hablando y riéndose.

- ¡Eh, Mr. Adriano! ¿Se puede saber qué ha pasado en tu casa? Está todo patas arriba.- Exclamó Pepeccolo.
- Ah, eso. Majin Senior quería comerse todas mis galletas y no lo he dejado. Por eso se ha enfadado y lo ha hecho todo trizas.- Respondió él a carcajadas.
- Bueno, da igual. Veníamos a por el dinero. Eso no se habrá roto, ¿o sí?- Inquirió Muten Ángel.
- El dinero... Os vais a reir chicos, pero lo he gastado todo en estas galletas.
- Que... ¡¿Qué?! ¿Tú estás mal de la cabeza o qué?- Espetó Pepeccolo.
- Vamos, vamos, no seáis malos. Podéis comer las que queráis, vuestras son.- Se disculpó Mr. Adriano extendiendo la bolsa.
- Por supuesto que nos las quedamos.- Respondió Muten Ángel quitándosela de un tirón.

Ambos se comieron una por cabeza, y se quejaron de lo mal que sabían.

- ¿Cómo puede esto ser tan caro si está malísimo?- Preguntó Pepeccolo.
- Yo que tú no comería más y esperaría aquí.- Apuntó Ten Shin Javihan soltando una risotada.
- Es buena idea. Ellos dos están en la gloria. Echémonos.- Sugirió Guten Ángel.

Así lo hicieron, y pasada una hora los cuatro se encontraron charlando a carcajadas, olvidando por completo que en unas horas aguardaba el combate de la semifinal...

- Oye, pues no estaban tan mal las galletas esas después de todo.- Soltó Pepeccolo con una sonrisa de oreja a oreja.


Para Pepe, feliz cumpleaños compañero :3



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